Hace un año Mateo Bolívar empezó a ser protagonista en varios medios de comunicación de Colombia inspirando a muchos y sorprendiendo a los incrédulos. A sus 19 años de edad fue el emprendedor más joven en estar en Shark Tank y recibir inversión. Curioso, disciplinado e ingenioso son algunas de las palabras con las que podríamos a definir a Mateo; el estudiante que estando en primer semestre administración de negocios internacionales en la universidad de la Sabana, tuvo una idea visionaria que tendría como foco valorar el tiempo de las personas.
Apasionado por el fútbol y la música, sobre todo por esta última. Mateo siempre sobresalió en su colegio por su espíritu emprendedor, siendo la venta de gomitas su primer acercamiento y su mamá la primera inversionista. Además, también se destacó por su liderazgo, fue personero, y por su excelencia académica lo cual le permitió entrar becado a la universidad.
Sin embargo, a medida que pasan los años los jóvenes se van volviendo cada vez más independientes y empiezan a enfrentarse al mundo, donde por ejemplo comienzan a encontrarse con filas largas e interminables a la hora de hacer diligencias en algunos establecimientos. Para muchos hacer este tipo de actividades es insatisfactorio, pero como Mateo siempre va más allá, producto de su experiencia en un banco, encontró una necesidad en el mercado que podría beneficiar a muchos negocios y por ende a sus usuarios o clientes.
Entonces, ¿por qué no crear algo que mejore la manera en cómo las personas están esperando por productos o servicios? Algo que les permitiera usar el tiempo mientras hacían fila para hacer otras actividades. Una solución para que los colombianos dejarán de invertir en promedio 100 horas al año haciendo fila. Con esto en mente nace Eline, cuando Mateo apenas tenía 17 años y llevaba dos semanas en la universidad.
Eline, antes Easy Line, se desarrolla entonces en varios momentos. La primera fue la etapa de incubación en el centro de emprendimiento e innovación (CEIS) donde empezó a tener forma. Luego Mateo Gana la convocatoria Generación CEIS 2019, que le permitió desarrollar un producto mínimo viable que a medida que avanzaba iba mejorando y cambiando su funcionalidad, más no el objetivo. Posteriormente, ya con Eline un poco más consolidada presenta su pitch en Bar del Emprendimiento donde conoció a una persona que integraba el equipo de ‘Shark Tank’
Colombia. el programa televisivo para emprendedores más importante del país.
Si bien al principio Mateo no estaba muy seguro de participar en ‘Shark Tank» e incluso había manifestado que no se presentaría, la producción lo convence y le manifiesta todas las puertas que se podían abrir estando en el programa. Entonces justo el día de su cumpleaños 19, dos años después de que Eline fuera solo una idea, presenta su pitch frente a los cuatro tiburones.Finalmente, Alex Torrenegra dio su voto de confianza a Eline.
Pero como en toda historia hay un antagonista. A principio de 2020 Eline ya estaba listo para salir al 100% al mercado, tenía algunos clientes, varios usuarios y conversaciones en la mesa. Sin embargo, en abril Colombia entra a cuarentena estricta y todos los restaurantes cierran. Entonces, Eline que funcionaba de manera sencilla de tal forma que cada persona cuando iba al establecimiento escaneaba un código para pedir su turno y regresaba cuando este le avisa, debido a la coyuntura tuvo que transformarse para enfrentar esta nueva realidad.
En consecuencia, Eline respondiendo a las necesidades del contexto y volviendo lo problemas en oportunidades, se ha reinventado. Hoy más que nunca se vuelve en una herramienta importante con características similares a la anterior, pero enfocada a la nueva realidad que permite controlar el aforo de los espacios para mantener el distanciamiento social, recolectar datos de los clientes y evitarles las filas, tres de los puntos fundamentales para la reactivación económica. Además, los negocios podrán contar con esta solución de manera gratuita durante el resto del año 2020, porque Eline está comprometido con el desarrollo país.
Hoy, Mateo a sus 20 años de edad, con dos emprendimientos en marcha, es sin duda una persona admirable que ha logrado adaptarse de la mejor forma posible a las circunstancias del ahora. Su gran ingenio y capacidad de solucionar los problemas es lo que ha permitido colocar nuevamente a Eline en el radar de los emprendimientos colombianos tecnológicos que ayudan a la transformación digital y por ende a esta nueva realidad.